El 15 de abril, unos días antes del comienzo de la Semana Santa tuvo lugar en el Centro Riojano de Madrid una conferencia sobre “Tolerancia Religiosa”, un tema de gran actualidad y relevancia teniendo en cuenta los recientes acontecimientos que han sucedido en el panorama internacional.
Esta conferencia forma parte del ciclo de conferencias del Foro Naciones Unidas, organizado conjuntamente por la fundación Paz y Cooperación y el Centro Riojano de Madrid, y que su próximo acto tendrá lugar el 30 de abril con la Embajada de Rusia sobre “La visión rusa sobre el contexto geopolítico actual. Relaciones entre Rusia y España”.
La conferencia dio inicio, con el recuperado José Antonio Rupérez, presidente del Centro Riojano de Madrid, y que presidió la mesa acompañado por Joaquín Antuña, presidente y fundador de Paz y Cooperación, Don Alfonso Ramonet, protocolo de Arzobispado de Madrid, Don Pedro López Garrido, expresidente del Centro Riojano y finalmente por M.I Señor Avelino Revilla Cuñado, Vicario General de la Archidiócesis de Madrid, quien impartió la gran conferencia magistral sobre “Tolerancia Religiosa”.
José Antonio Rupérez, señaló la importancia de los acontecimientos recientes como la visita del Papa Francisco a Emiratos Árabes y Marruecos, como una evidencia del acercamiento entre la religión cristiana y la islámica. Por su parte Joaquín Antuña, comenzó con la frase “pax, shalom, salam, namaste”, sobre la necesidad de que la religión este abierta hacia los creyentes y no creyentes, como una Pacem in terris. Este comentario, hacía referencia al 11 de abril de 1963, un hecho importante en la Iglesia Católica, cuando el Papa Juan XXIII firma la encíclica Pacem in terris (Paz en la tierra) y la Jornada de La Paz de 2003, cuando el Papa Juan Pablo II se refirió a ello como una “tarea permanente”. Es por ello, que no hay que dejar que se repita el ir en pro o en contra de las religiones, sino el desarrollar una filosofía del encuentro. Por todas estas razones, no podía faltar dentro del Foro de Naciones Unidas un tema tan importante como la religión.
Por otra parte, Alfonso Ramonet, trato sobre la relevancia e importancia del tema, donde en estos momentos, teniendo en cuenta las referencias que se han producido a nivel mundial, la tolerancia es “posible y necesaria”, y hay que descubrir juntos lo que ya está descubierto pero que nos empeñamos en ignorar. En Rabat, se produjo el encuentro entre el rey de Marruecos, Mohamed VI y el Papa Francisco, donde se llevaron a cabo los tres canticos emblemáticos, por parte de los cristianos el Ave María, por parte de los judíos el Adonay, y por parte de los musulmanes el Adhan y que al final cantaron todos unidos. Teniendo en cuento todo esto, se necesita buscar el amor a parte de cualquier ideología política y material. A continuación, leyó una carta de Pedro de Borbón, Duque de Calabria donde trata sobre la necesidad de ver en el rostro ajeno a alguien que es como nosotros.
Se refirió además, al gran M.I Señor Avellino Revilla, y a su espléndida biografía, ya que nació en 1960 en Madrid, y fue ordenado sacerdote el 12 de marzo de 1988. Estudió ciencias químicas en la Universidad Complutense de Madrid, y fue licenciado en teología por la Universidad Pontificia de Comillas en 1992 y Doctor en Teología por la Universidad Pontificia de Salamanca en el 2000. Ha sido profesor de Teología y Pedagogía Religiosa en la Facultad de Educación de la Universidad Complutense en 2005 y en el Instituto Superior de Ciencias Religiosas San Dámaso en 2011. Y finalmente, nombrado Vicario General de la Archidiócesis de Madrid en 2015.
M.I Señor Avelino Revilla, comenzó refiriéndose a los atentados del 11 de septiembre de las Torres Gemelas, que marcaron un antes y un después, al calificar a las religiones monoteístas como peligrosas, y como las causantes del sufrimiento que constituyen uno de los más tenebrosos capítulos de la historia humana. A este debate en auge, se dividió la posición del “creer” y el “saber.
Si echamos un vistazo atrás en el tiempo, en los diversos conflictos, la cuestión religiosa tiene un papel estelar, como con la Reforma Protestante y la Contrarreforma, donde se llevó a cabo una fuerte confrontación, que hizo que la tolerancia religiosa se convirtiera en un elemento básico de los Siglos XV y XVI en Europa. Pero la imposibilidad de resolver el problema solo por la fuerza, llevó a crear instrumentos que permitieran la existencia de ambas creencias. Ya que sin duda, encontramos una Europa dividida y un campo de batalla entre estados, donde “solo puede haber una fe” que hizo que la Paz de Augsburgo (Paz de las religiones), donde la fe de cada príncipe determinaba la de sus súbditos.
Aparecen voces que cuestionan estas persecuciones, y se compone lentamente la teoría de la tolerancia: el respeto de las creencias elegidas por cada individuo, la libertad religiosa y las primeras formulaciones de los derechos humanos. La tolerancia es esa concepción paternalista de creer que el otro está en el error, pero está dispuesto a superarlo, porque cada uno tiene el derecho a vivir su propia vida. La tolerancia es una virtud pública, que necesita descansar en cualquier sociedad plural. Es por ello, que toleramos lo diferente, lo molesto, lo que parece equivocado, tolerar significa soportar y este supone un esfuerzo o sufrimiento.
Frente al surgir de la intolerancia de ciertas religiones, fue la UNESCO en 1995 que hizo la Declaración de Principios sobre la Tolerancia, que estableció que cada individuo es libre de adherirse a sus propias convicciones y acepta que los demás se adhieran a las suyas propias. A ello, se le une por su parte la postura de Roma, que reconoce la Tolerancia Universal en el Concilio Vaticano II sobre la libertad religiosa con la declaración dignitatis humanae.
La necesidad de un diálogo interreligioso es absoluta. En la actualidad, existe una ineludible interdependencia entre las diversas partes del mundo, debido en parte a las migraciones que son fundamentales en nuestros países, el desarrollo de la tecnología y la industria moderna. Estos factores han provocado una mayor conciencia de pluralidad de las religiones del planeta, donde hace falta este dialogo interreligioso a favor de la Paz y la Justicia del mundo.
El 27 de octubre de 1986 en Asis, se llevó a cabo la Jornada Mundial de Oración por la Paz, con la participación de jefes y representantes de las Iglesias cristianas y de las religiones de todo el mundo a petición del Papa Juan Pablo II. Allí se unieron para rezar por la paz, y como la fuerza espiritual de las religiones puede ser una fuente de paz. Porque a pesar de procesar diferentes credos, todos allí estaban reunidos en busca del bien de la humanidad. Sin duda, se buscaba crear con ello un movimiento interreligioso de paz, y no que fuera un hecho aislado.
Es por ello, que M.I Señor Avelino Revilla nos informaba de que del 15 al 17 de septiembre de 2019, se reunirán los principales líderes de las principales religiones para llevar a cabo una Oración por la Paz, organizado por la Archidiócesis de Madrid, buscando a las “religiones y culturas en diálogo”.
Para finalizar, se trató de nuevo, las recientes visitas del Papa Francisco a Emiratos Árabes y a Marruecos. Donde ya en 2014 visitó Tierra Santa y declaró “que no tenía que haber lugar para el antisemitismo, la discriminación e intolerancia”. Esto supone un acercamiento, ya que se necesita que las distintas confesiones dialoguen para que aumente la cooperación entre las personas y que los imperativos morales incluyan la paz y la tolerancia mutua, que se puede observar en el documento “sobre la Fraternidad humana, por la paz mundial y la convivencia común”.
Añadió que se está llevando a cabo una Tercera Guerra Mundial a trozos en diversos sitos, y sobre todo la fuerte convicción de que las enseñanzas de las religiones se basan en la Paz, la fraternidad y la convivencia común. Es por ello, la necesidad de una construcción de la paz mundial y de detener las prácticas inhumanas. La cultura del diálogo, el que nos reconozcamos mutuamente en una igualdad de estatus, el crear una cultura del encuentro es necesaria.
“Somos un poliedro, con muchos lados diferentes y facetas, pero todos formamos una unidad, y no hay que olvidarlo”. Sin duda, la conferencia tratando la “Tolerancia Religiosa” dentro del Foro de Naciones Unidas, era necesaria.
Un vino español, naturalmente de La Rioja, puso fin a este brillante Foro y los asistentes que llenaron el Salón de la Lengua a rebosar tuvieron ocasión de intercambiar opiniones. Como en las bodas se conciertan uniones, aquí surgieron nuevas conferencias. La periodista Roxa Ortiz invitó a Don Avelino a protagonizar una de sus famosas noches de Roxa en el Gran Hotel Inglés al que asistirán también Joaquín e Isabel dos contertulios habituales.
El equipo de Paz y Cooperación al completo puso una nota de juventud y de compromiso reforzado por un elegante diplomático ruso.
Al Presidente Ruperez se le vio muy recuperado e interesado por una bella desconocida.
Una velada inolvidable donde el soplo del espíritu transformó un acto académico en un oficio de la Semana Santa.