Chipre y el Niño Jesús
Acto de entrega de premios del Concurso de Dibujos para elegir el logo conmemorativo del 50 aniversario de las relaciones internacionales entre España y Chipre, organizado por la Embajada de Chipre y el Colegio del Hospital Niño Jesús, que se ha celebrado el lunes, 22 de octubre a las 11:30, en el Teatro del Hospital Niño Jesús de Madrid.
Los premios y diplomas fueron entregados por el Presidente del Parlamento de la República de Chipre, Excmo. Sr Demetris Syllouris.
Estos simpáticos premios fueron una iniciativa de la embajadora de Chipre, Koula Sophianou, quien participó en un acto organizado por Paz y Cooperación y el Colegio del Hospital del Niño Jesús para entregar los diplomas obtenidos por los estudiantes de este benemérito hospital en el Premio Escolar Paz y Cooperación 2017 «Mirando a las estrellas», por parte de la Fundación participó Rosa Olazabal, patrona de Paz y Cooperación y representando al Ayuntamiento de Madrid en el AMPA de este colegio.
Koula muy emocionada en su intervención pidió a los estudiantes que la ayudarán a elegir un Logo y así lo hicieron.
Meses después la misma Koula ha felicitado a los participantes en el concurso de dibujos y les ha declarado embajadores de amor y de esperanza. Recordó que se cumplen 50 años de relaciones entre España y Chipre y que las relaciones son óptimas.
El Presidente del Parlamento de Chipre el Sr. Demitris Syllouris se mostró muy emocionado por la visita que efectuó acompañado por el gerente y el director del Hospital del Niño Jesús y prometió imitar esta iniciativa de Hospital Escuela y reproducirla en su país.
Entregó los premios a los ganadores, destacando el Primer Premio obtenido por Laura González Martínez una joven de 13 años y los diplomas a seis de sus compañeros, que representa un firme apretón de manos.
La delegación del Parlamento de Chipre junto con los miembros de Paz y Cooperación realizaron un recorrido por el colegio, quedaron muy impresionados por ver a un personal sanitario que se desvive por la salud de sus jóvenes enfermos y al mismo tiempo se ocupan de sus estudios, para que una vez sanos se conviertan en buenos ciudadanos.
Nos entusiasmó la entereza de los niños algunos con la cabeza rapada y de sus padres afrontando un futuro incierto, pero reconfortado por el cariño de quienes les visitan.
El teatro es muy pequeño y coquetón y al final hubo la tradicional foto de premiados, facultativos y visitantes. Se cerró así una página alegre, pues en este hospital se predica la esperanza.